“El Huerto de Blas” cuenta ya con renovados bancales

Este espacio formativo con el que cuenta el Colegio san Blas, se inauguró en 2016 y enseñan a los más pequeños hábitos de alimentación saludable y valores ecológicos

REDACCION. SANTA MARTA DE TORMES 23 de octubre de 2024 

El Ayuntamiento de Santa Marta de Tormes ha realizado una importante mejora en el huerto escolar del colegio San Blas, sustituyendo tres de los antiguos bancales de madera por nuevas estructuras de hormigón, un material más resistente y duradero. Esta actuación, que ha contado con una inversión de 4.719 euros, responde a la necesidad de garantizar la durabilidad de las infraestructuras del huerto, conocido como “El huerto de Blas”.

Las nuevas estructuras están elaboradas en bloque visto de color amarillo y han sido reforzadas con barras de hierro. Además, se han habilitado salidas de agua en la parte baja de los bancales para mejorar el drenaje. Cada bancal cuenta con unas dimensiones de 4,50 x 0,75 x 0,40 metros, y están ubicados en el lateral de acceso al centro, listos para ser utilizados por los alumnos en sus labores de cultivo.

La concejal de Obras, Marta Labrador, explicó que el proyecto contempla la sustitución completa de los ocho bancales del huerto. “El año pasado ya cambiamos dos de ellos, y ahora hemos completado tres más. Solo nos quedarían tres bancales por sustituir, y lo haremos en cuanto sea posible, para garantizar que los niños puedan trabajar y aprender de forma cómoda y segura”, afirmó Labrador.

El huerto de Blas fue inaugurado en 2016 como respuesta a las demandas de alumnos y profesores, con el objetivo de enseñar a los más pequeños hábitos de alimentación saludable, valores ecológicos y nociones sobre autoconsumo y emprendimiento. Desde entonces, ha sido un recurso fundamental en la educación de los estudiantes de Infantil y Primaria, quienes aprenden a preparar la tierra, regar, plantar y recolectar diversas hortalizas, como lechugas, espinacas, zanahorias, cebollas y remolachas, según la época del año.

El proyecto ha contado con la colaboración de instituciones como el Ayuntamiento de Santa Marta, la Universidad de Salamanca, la Oficina Verde de la USAL, Asprodes y la Fundación Tormes, así como con la implicación activa de toda la comunidad educativa: alumnos, profesores y familias.

Marta Labrador destacó la importancia de esta iniciativa educativa: “Es un proyecto muy bonito, porque no solo pone en valor el mundo agrícola, sino que también enseña a los niños la cultura del esfuerzo y la satisfacción de ver los frutos de su trabajo”.