El encanto de los jardines de la Escuela Municipal de Hostelería de Santa Marta fue el telón de fondo perfecto para el acto oficial de apertura de las fiestas locales. En un cambio notable, el Ayuntamiento decidió trasladar el tradicional pregón institucional del salón de plenos a estas magníficas instalaciones. David Mingo, alcalde de Santa Marta, inauguró el evento destacando la belleza del nuevo escenario y la importancia de innovar en los espacios para eventos tan significativos.
Durante su discurso, Mingo subrayó que “de bien nacido es ser agradecido” y destacó que el pregón institucional es una oportunidad para reconocer la trayectoria de personas que han contribuido significativamente al municipio. Este año, el honor recayó en Emilio Pérez Escribano, un empresario local cuya historia es sinónimo de esfuerzo y éxito. Emilio, querido y respetado por todos, ha dejado una huella imborrable en Santa Marta, por lo que la elección de Emilio como pregonero no podría haber sido más acertada. Su vida ejemplifica los valores de trabajo duro, dedicación y amor por Santa Marta.
Destacó también la faceta empresarial de Emilio Pérez Escribano, habiendo fundado en Santa Marta la actual empresa Emilio Pérez Escribano e Hijos S.L., que brinda empleo a numerosos vecinos del municipio y su incansable dedicación al servicio público como concejal del ayuntamiento y como fundador y directivo de la Unión Deportiva Santa Marta. Su compromiso con Santa Marta y su pasión por el deporte han dejado una huella imborrable en el municipio, incidiendo David Mingo en que “Esto es hacer municipio y generar identidad”.
Ya en el pregón institucional, Emilio Pérez Escribano tomó la palabra y habló con el corazón sobre sus duros comienzos como encargado de una finca, responsabilidad que asumió tras el fallecimiento de su padre. Destacó que los pilares fundamentales de su vida han sido sus tres hijos, quienes actualmente dirigen la empresa, sus nueras y nietos, y, sobre todo, su esposa Conchi Curto, el pilar vital de su existencia.
No quiso dejar pasar la oportunidad de reconocer a esa otra familia que se forma con los años y que solo los hombres generosos saben valorar: sus trabajadores. Junto con ellos, ha construido la empresa que hoy es un referente. Recordando de forma muy especial y emotiva a dos de sus trabajadores, Upiano Moreta y José Antonio Labrador, a quienes siempre llevará en su recuerdo con gran cariño y gratitud.
Emilio Pérez Escribano
Nacido el 9 de noviembre de 1949 en Villamayor de la Armuña, Emilio es el tercero de nueve hermanos. Su infancia transcurrió en la finca de Fraguas de la Valmuza, donde desde muy joven trabajó como hortelano y vaquero. A los 16 años, la vida le puso a prueba con la pérdida de su padre, lo que le obligó a asumir responsabilidades adultas y continuar con la labor de su padre como encargado de la finca.
En 1967, su familia se trasladó a Santa Marta, y Emilio se unió a ellos un año después tras finalizar su compromiso en la finca. Inspirado por su hermano mayor, quien trabajaba como calefactor en Francia, Emilio siguió sus pasos en la década de los 70. Después de casarse con Conchi, la pareja vivió y trabajó en León, pero en 1977 regresaron a Santa Marta para establecerse definitivamente.
Los años 80 vieron a Emilio emprender como autónomo, recorriendo las localidades de la provincia y ganándose el respeto y la confianza de una creciente clientela gracias a su profesionalidad y dedicación. Su esfuerzo y ética de trabajo le permitieron contratar personal, destacando entre ellos a Ulpiano Díaz Moreta, una figura entrañable de la localidad.
A mediados de los 90, Emilio dio un paso más al fundar la empresa Emilio Pérez Escribano e Hijos S.L., que hasta la fecha sigue siendo un pilar de la economía local, empleando a unas 30 personas, en su mayoría del municipio.
Emilio ha sido un ciudadano comprometido con Santa Marta de Tormes. Su labor en la directiva de la UD Santa Marta y su rol como concejal de deportes y festejos del Ayuntamiento entre 1988 y 1990 son testimonio de su vocación de servicio público.
Emilio Pérez Escribano será el encargado de abrir oficialmente las fiestas patronales de Santa Marta de Tormes, su hogar desde hace 57 años. EL acto ha estado cargado de emoción y significado, en el que un hombre que ha dedicado su vida al trabajo duro y al bienestar de sus paisanos ha compartido sus vivencias y anécdotas. Santa Marta se ha vestido de gala para rendir homenaje a uno de sus hijos más queridos y respetados, celebrando un legado de esfuerzo, perseverancia y amor por su tierra.
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