Santa Marta conmemora el Día Mundial de la Cruz Roja con un emotivo acto en su sede comarcal

La sede comarcal de Cruz Roja en Santa Marta ha sido este jueves escenario de un emotivo acto conmemorativo con motivo del Día Mundial de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, una fecha que coincide con el aniversario del nacimiento de Henry Dunant, fundador del movimiento humanitario más grande del mundo.

El evento ha congregado a voluntarios, personal laboral y personas usuarias en una jornada que ha servido para reconocer el compromiso, la entrega y la solidaridad de quienes forman parte de Cruz Roja, tanto a nivel local como global. Durante el acto, se ha hecho hincapié en la importancia de los siete principios fundamentales que rigen la acción humanitaria de la organización: humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, unidad, voluntariado y universalidad.

La jornada ha estado cargada de simbolismo y de agradecimiento hacia quienes, a través del voluntariado y el trabajo diario, hacen posible la labor de Cruz Roja en Santa Marta y su comarca. El acto se enmarca dentro de las celebraciones organizadas por Cruz Roja en toda la provincia de Salamanca, con actividades en la sede provincial y en distintas asambleas y centros comarcales, como los de Ciudad Rodrigo, Béjar, Vitigudino, Peñaranda de Bracamonte y La Alberca.

Javier Cembellín presidente comarcal Cruz Roja en Santa Marta

Durante el encuentro, el presidente comarcal de Cruz Roja ha destacado el papel esencial que desempeña la organización en contextos de crisis y vulnerabilidad, y ha puesto en valor la labor del voluntariado y del personal en los 191 países donde está presente Cruz Roja, especialmente en la provincia de Salamanca: “Hoy más que nunca y en un mundo cada vez más convulso por la polarización y deshumanización, debemos tener muy presentes y defender nuestros siete principios fundamentales, incluso en los entornos más complejos. Las necesidades humanitarias aumentan año tras año, pero nuestro compromiso es, incluso en los momentos más difíciles, permanecer al lado de la humanidad y mantenernos firmes en la protección del espacio humanitario. Todo acto de bondad suma y ayuda en la transformación social hacia modelos más justos, inclusivos y empáticos.