El Santa Marta pone contra las cuerdas a la Arandina y convierte el San Casto en un fortín

La Unión Deportiva Santa Marta firmó un meritorio empate (0-0) ante la Arandina en el San Casto, en un partido de alta intensidad donde los locales demostraron carácter, orden y ambición frente a uno de los rivales más potentes de la categoría. El equipo de Santa Marta logró frenar a un conjunto visitante que llegaba como cuarto clasificado y, por momentos, lo puso contra las cuerdas con una segunda mitad de gran nivel.

Desde los primeros minutos, la Arandina mostró su peligro con una llegada en el minuto 3 y varias acciones ofensivas que obligaron a la defensa local a emplearse a fondo. Antonio, en el 12’, cortó una peligrosa contra que pudo haber acabado en gol, y Rivas, al 27’, salvó un disparo muy comprometido que ya se colaba en portería.

El Santa Marta respondió con acciones de mucho mérito. En el 33’, un disparo se marchó desviado por el palo corto tras una buena combinación en el área. Poco después, Diego Alonso desbordó por banda y puso un centro peligroso que no encontró rematador. El primer tiempo concluyó con empate en el marcador, tras una fase inicial de dominio visitante y una progresiva reacción de los locales.

En la segunda mitad, el Santa Marta fue a más. María Hernández movió el banquillo con la entrada de Kevin por Chopi, y poco después, Santos estuvo a punto de marcar, pero su disparo fue desviado por la defensa. Mano recogió el rechace, aunque su tiro fue detenido sin problemas. La Arandina respondió con alguna llegada aislada, pero fue el conjunto local quien tomó la iniciativa en los últimos minutos.

En el 85’, Cristian Mayo levantó al público del San Casto con un potente disparo desde fuera del área que se estrelló en el larguero. Fue la ocasión más clara del encuentro. Solo dos minutos después, Sergio salvó al Santa Marta con una gran intervención, y en el 89’, un mal despeje visitante tras un centro local volvió a encontrarse con la madera.

A pesar de no conseguir los tres puntos, el empate deja buenas sensaciones para un Santa Marta que compitió de tú a tú ante un rival de la parte alta de la tabla. El San Casto vuelve a hacerse fuerte, y el equipo continúa creciendo con una identidad sólida y una afición entregada.